Estallido inflacionario, derrumbe del salario y empiezan los rumores K sobre Guzmán
Economía -
Por Armando Maronese *
El ministro de Economía Martín Guzmán está en la mira. Así lo establecen rumores que se disparan desde el Instituto Patria luego de una inflación totalmente fuera de control, que evapora el poder adquisitivo de los ciudadanos.
El Frente de Todos sigue en una dura interna de la que no puede salir. Mientras unos responsabilizan a los K por generar desconfianza en los mercados, los K arremeten contra el ministro de Economía Martín Guzmán (¿para no pegarle al presidente Alberto Fernández?) de hablarles más a los amigos de Wall Street que al propio electorado.
Lo cierto es que el Indec blanqueó un dato durísimo: en el acumulado de los últimos 12 meses, los salarios subieron 29,6%, muy por detrás de la inflación acumulada para del mismo período (38,5% interanual), diluyéndose en el primer semestre la idea de que los salarios le ganen 5 puntos a la inflación.
El organismo detalló que los sueldos de los trabajadores del sector privado (registrados) subieron 4% en enero pasado, respecto a diciembre, y eso apenas alcanzó para empatar con la inflación mensual.
Guzmán está complicado, pero el kirchnerismo no está mejor.
La pregunta es: ¿soluciona lanzar por la ventana a un ministro o el problema es aún mayor?
A su vez, el otro dato alarmante es ese: desde hace medio año la inflación no baja del 4% promedio, muy por encima de la tasa, y ya comienzan a verse nubarrones en el frente de financiamiento local. Agentes financieros le piden a Hacienda una mejora en las tasas.
Todo esto es un combo letal para la pax cambiaria en medio del calendario electoral, las escuálidas reservas del Banco Central de la República Argentina (BCRA) y la renegociación con el FMI.
Sin mencionar que el binomio Fernández-Fernández se presentaron en la campaña electoral 2019 como los reactivadores de la economía pero terminaron siendo los gestores de la pandemia.
Según el periodista 'Beto' Valdez, “'este muchacho de Columbia le habla más a sus amigos de Wall Street que a nuestro electorado', dicen despectivamente en el kirchnerismo respecto a las últimas incursiones mediáticas del ministro de Economía, Martín Guzmán. Demostrando que en el Instituto Patria no sienten simpatía por el titular del Palacio Hacienda sobre todo por los resultados que se perciben en la economía real y la pérdida de poder adquisitivo de sus votantes.
En una nota en Mdzol, titulada "Por qué peligra la continuidad de Guzmán en el Palacio de Hacienda", el comunicador lanzó:
"Obviamente que gran parte de la disparada inflacionaria es atribuida desde el Patria al ministro Matías Kulfas. Pero a esta altura ya es casi una anécdota. Todos los dardos apuntan contra Guzmán. Su permanencia en el cargo está muy cuestionada. Dicen que Kicillof tiene candidatos para reemplazarlo, uno de ellos es Augusto Costa, el ministro de la Producción bonaerense. Ex secretario de comercio de Cristina Fernández de Kirchner, quien además lo valora como técnico.
A esta altura el aval de Alberto Fernández al titular del Palacio de Hacienda no es tan estratégico. Casi que no mueve el amperímetro con resultados muy pobres. Voceros confiables del Frente de Todos aseguran que la continuidad de Guzmán depende de Máximo Kirchner, quien mantiene sus diferencias con el ministro pero no está de acuerdo con cambiar en medio de este contexto y mucho menos por un alfil del gobernador. Ahí hay una relación tirante pese a que ambos responden a la vicepresidenta. No se llevan bien, tienen sus diferencias y ambos saben que están en competencia por 2023, ya sea por la candidatura presidencial o por Buenos Aires.
En la movida de sostener por ahora a Máximo también se suma Sergio Massa. Ambos creen que hay que darle un chance más en medio de la negociación con el FMI y la pelea por frenar la inflación. Por ahora el ministro no muestra buenos resultados y de su performance depende el resultado de las elecciones de medio término. ¿Cuánta paciencia le tendrán?".
Durante el fin de semana largo de Semana Santa, el académico pareció lanzarle un palito al Instituto Patria cuando desde CNÑ fue consultado por las negociaciones con el FMI:
"Es que los diez años es una cuestión que tiene que ver con las líneas de crédito que existen en el Fondo Monetario Internacional. Cambiar eso requiere del apoyo de países como Estados Unidos, China, Alemania, Japón, Francia. Un cambio que justamente tienen que votar. No es una negociación técnica que se da entre el staff del Fondo Monetario Internacional y el gobierno argentino: es una negociación de carácter geopolítico que no hay tiempo suficiente si uno quisiera tener un acuerdo pronto. Para poder lograr algo así hace falta mucho más tiempo y hay incertidumbre al respecto.
La pregunta es: ¿Vale que nosotros, como miembros del FMI y del G20, busquemos implantar una discusión que lleve a transformación en las líneas de crédito del Fondo Monetario Internacional para resolver los problemas estructurales que tiene el mundo y por supuesto que ayude primeramente en nuestro caso a la Argentina? Por supuesto que vale.
¿Hay tiempo ahora para tener un cambio en la línea de crédito con respecto a esta de diez años si es que queremos tener un programa en mayo o junio? No, no va a pasar. Nosotros lo que decimos es: bueno, hay algo que es un problema. Es tan grande el préstamo que tomó el gobierno de Juntos por el Cambio que tenemos un problema y cualquier acuerdo de diez años nos pone una tensión. Pero contamos con estas herramientas. Si ahora se llega a un acuerdo lo importante es que haya condiciones que si después hay cambios en las líneas de crédito y se alargan los plazos, Argentina pueda acceder a esas mejores condiciones".
Parece que esto no cayó muy bien en el ala más dura del oficialismo.
La realidad es que no hay forma de criticar al Gobierno de Macri y defender el relato con números peores que la gestión anterior, mientras amenaza la segunda ola de coronavirus.
Por Armando Maronese
M, 06/04/2021 - 1:21am
